El Forjista

Campaña sucia, agresiones y fraude

 

Ante la posibilidad de perder en las próximas elecciones esa asociación ilícita llamada Cambiemos, ahora transformada en Juntos por el Cambio para disimular el creciente desprestigio, ha emprendido la campaña electoral más sucia, agresiva y mentirosa desde que se tenga memoria desde el retorno de la democracia en 1983.

Es casi una ley de la política argentina que la oligarquía no deja el poder mansamente, antes de eso prefiere someter al país a las mayores desgracias ya sea a través del fraude, la represión o cualquier mecanismo antidemocrático que le permita sostenerse en el gobierno y continuar con sus privilegios aún a costa de perjudicar a millones de compatriotas.

Una de las últimas maniobras del gobierno consistió en publicar una encuesta trucha cuyo principal difusor fue ese nido de extorsionadores conocido como Clarín, donde le daba una ventaja a Macri sobre Alberto Fernández, la maniobra quedó al descubierto rápidamente porque la suma de todos los votantes daba 105 %.

Esta encuesta fue la respuesta ante la situación en que casi todas era notoria la ventaja de la fórmula de los Fernández sobre la del macrismo, diferencia que aún mantenían aquellos que dicen, a nuestro entender sin razón, que el macrismo estaría acortando la distancia.

Además, existen otras razones para desconfiar de toda encuesta que no le otorgue a la fórmula de la oposición con mayores posibilidades al menos un 40%, veamos la situación.

Aún aquellos sectores infectados por el virus del odio antikirchnerista reconocen que el núcleo duro del kirchnerismo alcanza a un tercio de la población, lo cual sería el 33%, pero bajémoslo al 30%, como para evitar cualquier subjetividad.

Creemos además que con la sumatoria de un peronismo unido al cual se han sumado sectores que antes cuestionaban al kirchnerismo, empezando por el mismo Alberto Fernández y continuando con Sergio Massa, Pino Solanas, Rodríguez Saa, Victoria Donda, Hugo Moyano, etc.

Si además consideramos que en Córdoba donde el macrismo obtuvo la diferencia para ganar en el 2015, ahora ya existen muchos sectores del peronismo a través de senadores, diputados e intendentes que han señalado su disposición a votar por Alberto-Cristina.

También se han manifestado de igual manera, el peronismo en algunas provincias que estaban claramente enfrentados con el kirchnerismo como el de La Pampa o el desprendimiento en Chubut que respondía a Mario Das Neves en el que ahora su sucesor Mariano Arcioni ha expresado su apoyo a Alberto Fernández.

Con todo esto no resulta nada disparatado pensar que podría sumar un 10 % más para llegar hasta el 40%, cifra que no asegura el triunfo en octubre pero que hace pensar que la principal oposición tiene una buena base que le permitiría ganar en primera vuelta si hace las cosas bien durante la campaña electoral para convencer a muchas de las personas que aún no tienen su voto definido.

Hacer las cosas bien durante la campaña significa sectorizar el mensaje para convencer a aquellos más predispuestos a votar por el macrismo como son las personas mayores de 55 años y que serán las principales perjudicadas en caso que Macri obtenga la reelección, por el proyecto impuesto por el FMI de subir la edad y bajar las jubilaciones.

Pero hay otros números a considerar y es que el macrismo ha perdido en casi todas las elecciones provinciales realizadas hasta el momento, a pesar que, el gobierno se esforzó por presentar las elecciones como discusiones meramente regionales, el cambio de nombre de la vergonzante marca Cambiemos, evidencia la decadencia por la que atraviesa el macrismo y sus aliados, muchos de los cuales optaron por esconder ese nombre piantavotos.

El último número que queremos mencionar es que encuestas realizadas hace algunos meses marcaban con claridad que el 60% de los argentinos se consideraba opositores al nefasto gobierno de Macri, por lo cual sospechar que la principal alianza opositora pueda obtener el 40% no resulta para nada disparatado.

Pero volvemos a insistir, eso no significa que el triunfo esté asegurado, ni mucho menos, principalmente porque el gobierno cuenta con la casi totalidad de los medios que están dispuestos a mentir, difamar y extorsionar con tal de no perder la jugosa pauta a la que cambiemos los ha acostumbrado y que ha sido uno de los pocos gastos que se ha incrementado de manera brutal, pero además como los dueños de esos medios también son parte de esa oligarquía existe razones ideológicas y corporativas para impulsar la continuación del neoliberalismo.

Después que el titiritero Durán Barba los arengó, las marionetas salieron a agredir violentamente a sus adversarios, se puede apreciar en los reportajes a un presidente sacado, fuera de sí, que insulta y despotrica como si se tratara de un mero espectador de la realidad y no fuera el principal responsable del desastre a que ha conducido el país.

Pero si ninguna de esas operaciones le da resultado está Smartmatic, empresa venezolana muy cuestionada en todos los lugares donde participó, con un software que se niega a hacer público para ser controlada y que realizó pruebas que fueron un rotundo fracaso.

El primer paso para asegurar que las futuras elecciones sean verdaderamente limpias consiste en que el gobierno rompa el contrato con Smartmatic, realizando el escrutinio y la transmisión de telegramas de la misma forma en que se viene realizando desde 1983.

Cualquier trampa es esperable de estos saqueadores por eso hay que estar muy atentos y no dejarse arrastrar por las provocaciones y las falsas noticias.

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