El Forjista

Biografía de Néstor Kirchner

Kirchner y el arte de lo imposible

Capítulo 32 - Daniel Scioli

Kirchner tuvo varias discrepancias con su vicepresidente, sin embargo, siempre reconoció que se manejó con lealtad especialmente luego de ser testigo del comportamiento del vicepresidente de Cristina, Julio Cobos, en una de las leyes más importante de su gobierno y luego devenido en jefe de la oposición.

Scioli y Kirchner se conocieron el 13 de enero de 2002 cuando el que era secretario de Turismo fue a pasar su cumpleaños en El Calafate, un tiempo después el matrimonio de Scioli y Karina Rabolini invitaron a los Kirchner a cenar a su casa en el barrio del Abasto, además Cristina y Scioli habían integrado el mismo bloque de diputados, a partir de ese momento tuvieron una relación cordial, lo que no impidió que a lo largo de los años tuvieran diferencias.

Daniel Scioli nació el 13 de enero de 1957, cursó estudios en el Colegio Ward de Ramos Mejía y en el Carlos Pellegrini, se inició en la política por iniciativa de Carlos Menem que utilizó la modalidad de convocar a personas destacadas y conocidas en otras actividades como Palito Ortega, Carlos Reutemann, en el caso de Scioli era conocido como corredor de carreras de lanchas además de provenir de una familia propietaria de un conocido comercio de electrodomésticos, en enero de 1997 fue elegido diputado nacional y reelecto en el 2001.

Durante la breve presidencia de Adolfo Rodríguez Saa dejó la banca para asumir como secretario de Turismo y Deporte cargo en el que fue confirmado por Eduardo Duhalde.

Duhalde pretendía que el vice de Kirchner fuera Lavagna, pero ni a Kirchner ni a Lavagna le agradaba la idea, el duhaldismo intentó con otras opciones como Chiche Duhalde, Alberto Balestrini y Juan José Álvarez, pero Kirchner que no quería que le impusieran a su vice, optó por Scioli que además tenía una buena imagen en el electorado y era una figura conocida, posiblemente más que el candidato a presidente.

El 21 de febrero de 2003 hubo una reunión en la casa de Carlos Ruckauf, ex gobernador de la provincia y vicepresidente de Menem, con Duhalde y Lavagna en un último intento de convencer al ministro de economía que acepte la candidatura, Kirchner tomó la iniciativa citó a Scioli para esa noche en la casa de la provincia de Santa Cruz, a esa altura habían tenido varias reuniones cuando el gobernador de la provincia Patagónica se juntaba con el secretario de Turismo para promocionar El Calafate.

Scioli tenía una intención de voto que superaba a Chiche Duhalde en la provincia, esa noche le propuso que fuera su vice, Scioli aceptó aunque tenía en la mira la Jefatura de Gobierno de la Ciudad de Buenos Aires, al otro día se reunieron en el departamento de Kirchner con sus respectivas esposas, acordaron realizar la presentación de la fórmula el martes 25 de febrero en el ND Ateneo, después Kirchner llamó a Duhalde para anunciarle que ya tenía a su compañero de fórmula y le pasó con Scioli.

El vicepresidente mantuvo su primer desacuerdo con el kirchnerismo en la derogación de las leyes de Obediencia Debida y Punto Final cuando declaró: “Los países serios no anulan leyes" (1). Cuando se trató la derogación de las leyes no estuvo Scioli comandando la sesión, sino que lo hizo José Luis Gioja.

El 6 de agosto de 2003, Daniel Scioli se reunió en su casa con importantes empresarios, seis días después al hablar en el Coloquio de Ideas, anunció un incremento de tarifas, el presidente envió a su vocero Miguel Núñez a reafirmar que no había previsto ningún aumento de las tarifas, unos días antes el vicepresidente había relativizado que la derogación de las leyes de impunidad fuera una prioridad.

Una semana después se hizo notoria la disputa, Scioli intentó ser recibido por el presidente cuestión que no logró, el vicepresidente declaró públicamente: “A mí también me eligieron, esa movida le costó a Scioli que desplazaran de la Secretaria de Turismo a toda su gente y que no fuera sido atendido por dos semanas”.(2)

Sin embargo, un tiempo después se reunieron y limaron asperezas, cuando se acercaban las elecciones en 2007 Scioli mantenía muy buena imagen, marchaba primero en las encuestas en la ciudad de Buenos Aires, pero Kirchner prefirió que fuera candidato a la gobernación en la Provincia de Buenos Aires porque los votos que podía obtener le permitían a la fórmula presidencial ganar en primera vuelta, decisión que vista con el diario del lunes, significó dejar el camino libre a Macri en la ciudad.

Luego del desplazamiento de Ibarra de la jefatura de gobierno de la ciudad de Buenos Aires, asumió Jorge Telerman que adelantó las elecciones para junio, el kirchnerismo no estaba de acuerdo porque no le daba tiempo para instalar a su candidato que era Daniel Filmus.

Kirchner se metió de lleno en la campaña en CABA donde dejó una frase que luego la repetirían otros: “Hoy lo pueden llamar Mauricio, pero siempre es Macri”.

El dirigente del partido Propuesta Republicana PRO fue el triunfador con el 45,62% de los votos, seguido por Filmus con el 23,77% y en tercer lugar Telerman con el 20,7, los dos primeros debían disputar en una segunda vuelta, que fue ganada con amplitud por Macri con el 60,96 % contra el 39,04 % de su contendiente.

En septiembre de 2010 el gobernador Scioli se reunió con Juan Manuel Buzzali, esposo de Carolina Píparo, quién perdió un bebé estando embarazada al ser baleada cuando salía de un banco en el centro de La Plata. Al retirarse Buzzali declaró que el gobernador le había indicado “que tenía las manos atadas”, nadie en la gobernación salió a desmentirlo y además apareció Duhalde que dijo que era Kirchner el que le ataba las manos.

Unos días después Kirchner participa en un acto en La Boca y se refiere al asunto, comenzando por cuestionar a los jueces por “permitir que los delincuentes entren por una puerta y salgan por otra” y a los opositores que “especulan con el dolor de la gente”.

También le dedicó un párrafo a Duhalde que siendo gobernador había elogiado a la policía de la Provincia de Buenos Aires a la que había calificado como la mejor policía del mundo sin que la seguridad en esa provincia mejorara.

En cuanto a Scioli dijo: “Le pido al gobernador Scioli que nos diga quién le ata las manos. Para ayudarlo. Pero hay que hablar con nombre y apellido de quienes son los que traban o impide la aplicación de la seguridad”. (3)

Por la noche en un programa de televisión el jefe de Gabinete de la gobernación, Alberto Pérez aclaró que Scioli se refería al Poder Judicial.

El 5 de octubre de 2010, Kirchner y Scioli se reunieron había dos temas que tratar y aclarar, uno era la declaración en el sentido que tenía las manos atadas y la otra la candidatura de Scioli a la presidencia en 2011.

Los medios especularon sobre la posibilidad que Scioli lanzara su candidatura compitiendo con el kirchnerismo, incluso De Narváez había indicado que si Scioli estaba dispuesto a romper con el gobierno, no tendría inconvenientes en recibirlo en su partido.

El diario La Nación que tantas veces anunció el final del kirchnerismo se aventuraba a adelantar que Kirchner se presentaría como candidato a gobernador de la provincia de Buenos Aires ante la imposibilidad de ganar la presidencia.

A pesar de las predicciones apocalípticas que los diarios aventuraban, en esa reunión Kirchner y Scioli llegaron a un entendimiento y a los pocos días el gobernador estuvo en un acto en Río Gallegos acompañando a Kirchner en su última aparición pública.

Debe decirse que varios intentaron tentarlo para que diera el salto fuera del kirchnerismo, cosa que Scioli nunca hizo, además de De Narváez, lo hicieron Duhalde, Massa y Macri, sin resultado en ninguno de los casos.

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(1) Kamikazes. Los mejores peores años de la Argentina Reynaldo Sietecase. Aguilar. 2012. Pag. 321
(2) Diez años. Una década de gobierno kirchnerista. Daniel Miguez. Planeta 2013. Pags. 68 y 69
(3) Idem Pag. 454

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